Imagínate por un momento a una exploradora. Seguro que te viene a la mente una mujer con unos pantalones cortos verdes, a juego con una camisa de manga corta y unas botas con calcetines hasta las rodillas. 

Pues una de las primeras exploradoras del mundo no llevaba nada de eso; Fanny Bullock hizo todas sus expediciones vestida al estilo victoriano: blusa ajustada cerrada hasta el último botón, una falda recogida en la cintura que caía hasta los pies y en la cabeza un salacot (casco de safari). Todo esto subida a una bicicleta, acompañada por su marido y un cuaderno de viajes donde escribiría sobre sus proezas y descubrimientos.

Fanny Bullock en una de sus innumerables expediciones

Fanny Bullock Workman nació en 1849 en Massachusetts, Estados Unidos, en el seno de una familia acomodada. Su padre, como gobernador del Estado, le facilitó una educación avanzada. Se formó en las mejores instituciones de Nueva York, París y Desdre.

En 1881 se casó con William Hunter Workman, un médico adinerado que, aun con problemas de salud, se convirtió en el perfecto compañero de viajes. Tras contraer matrimonio, Fanny conservó su apellido de soltera, cosa poco habitual en Estado Unidos; pero William sabía que se casaba con una mujer poco convencional.

Motivada por sus propios sueños y siendo fiel a su naturaleza inconformista, Fanny Bullock tenía algo muy claro: quería viajar por el mundo y llevar al límite todas sus capacidades. Fue al poco de casarse cuando empezaron a practicar el alpinismo en las montañas de Nueva Hampshire, llegando a alcanzar la cumbre del Monte Washinghton (1.918m) en varias ocasiones

Fanny junto a su marido William

Al contrario que en Europa, los clubes de alpinismo estadounidenses no solo permitían mujeres, sino que además las animaban a que practicaran este deporte. Así que cuando en 1889 se mudaron a Alemania, Fanny tenía claro que no iba a convertirse en una ama de casa: sería una exploradora y escribiría con detalle todos sus viajes y aventuras

Fue entonces cuando William y Fanny se dispusieron a recorrer Europa. Ella, decidida a recorrer el mundo subida a su bicicleta y con su piolet a cuestas; y él, dejando atrás una exitosa carrera como cirujano siguiendo los pasos de su mujer. 

Bullock sosteniendo un periódico para apoyar el voto femenino. Fuente: Wikimedia.

Entre 1888 y 1893, Fanny cruzó Suiza, Francia e Italia, convirtiéndose en 1891 en una de las primeras mujeres en escalar el Mont Blanc. Además de su marido, siempre le acompañaba una tetera de hojalata que colgaba del manillar, un látigo para espantar a posibles animales peligrosos y su inconfundible salacot. 

En 1895 realizaron su viaje más largo hasta la fecha: más de 4.500 kilómetros en bicicleta por nuestra península. Recorrieron la costa mediterránea desde la frontera francesa, atravesaron Andalucía desde Jaén, subieron por La Mancha hacia Madrid y cruzaron La Rioja y Aragón hasta Irún. Inmortalizaron las vivencias de esta aventura en su libro: Sketches Awheel in Modern Iberia, donde describieron España como «rústica, pintoresca y cautivadora»En el mismo, cuentan cómo hacían más de 70 kilómetros al día con unos nueve kilos de equipaje cada uno. 

Bullock montando una tienda Mummery

Fanny siempre buscaba retos mayores, por eso logró convencer a su marido para explorar otros territorios más allá de Europa como Indochina, la India o Argelia. 

El reto más importante de su vida vendría en 1898 cuando se aventuraron a remontar el río Indo hasta llegar al Himalaya. Pasaron 2.500 kilómetros encima de la bici recorriendo distintos territorios. Ese mismo verano descubrieron la cordillera del Karakórum, un viaje que les llevaría dos años y medio. Esta vez iban acompañados de guías suizos, que por aquel entonces ya tenían fama de ser excelentes alpinistas. 

Para poder coronar los picos más altos debían aclimatarse al frío y al mal de altura. Bullock se refugiaba en campamentos base para reponer energías y poder seguir superando tramos. Así, consiguió convertirse en la primera mujer en subir algunas de las montañas más altas

Uno de los libros de Bullock. Fuente: Wikimedia.

Sus hazañas llamaron la atención de los medios de comunicación, y ella aprovechaba cada entrevista para declarar en favor de las mujeres; Bullock era una activista del movimiento sufragista. De hecho, uno de los momentos más importantes de su carrera fue cuando se convirtió en la portada de varios periódicos pidiendo el voto para la mujer. 

A los 58 años se instaló en Francia donde compaginaba su trabajo de escritora y conferenciante; publicó muchos libros que narraban sus aventuras y experiencias en diferentes países del mundo. Fue ocho años más tarde, en 1925, cuando fallecía en Cannes, dejando atrás una vida llena de aventuras que compartió con sus lectores.

Fanny hizo mapas de montañas, ríos y glaciares. Batió el récord de altitud al coronar el Pinnacle Peak con 6.930 metros. Recorrió más de  22.500 kilómetros, muchos de ellos en bicicleta. Recibió numerosas medallas de honor de sociedades geográficas y de montañismo. Y consiguió ser reconocida como una de las montañeras más importantes de su época.

 

Comments

  1. Gracias por este artículo, no conocía a esta infatigable viajera. Una mujer pionera y luchadora.
    Una luchadora por los derechos de la mujer. Alguna de ellas aún silenciadas y muchas olvidadas.

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