Inventora, programadora e investigadora, Samaira es uno de esos casos en los que el talento asoma desde la más tierna infancia. Con tan solo once años ha llamado la atención de gigantes tecnológicos como Microsoft y Google, lanzando un producto que ha sido un éxito sin precedentes.
La joven nació en 2008 en Santa Clara, California. Criarse en Silicon Valley, meca de la innovación, y tener como padre a un ingeniero que trabaja en Intel, solo puede apuntar en una dirección: la tecnología.
Con seis años, esta niña prodigio comenzó a interesarse por la programación y, de la mano de su padre, Rakesh Mehta, se aventuró en un hobby que ha pasado a convertirse en su pasión.
Dos años después, Samaira contaba con los conocimientos de un experto en la materia, lo que despertó la necesidad de inventar, con la ayuda de su hermano Adit de seis años, un sistema que facilitase el aprendizaje de programación para otros niños.
Codder Bunnyz, jugando a programar
Esta idea y su pasión por los conejitos se materializó en Coder Bunnyz, un juego de mesa para los más pequeños, que de forma dinámica y divertida toca conceptos relacionados con la codificación.
Después de haber desarrollado un producto redondo, Samaira se puso la gorra de directora de marketing para idear una estrategia que garantizase la distribución de CoderBunnyz. El objetivo era incentivar las donaciones del juego de mesa a escuelas, para después, a través del programa «Girls U Code”, realizar talleres en las aulas dirigidos especialmente a las niñas que estuvieran interesadas en comprender el juego.
“Quiero construir una gran comunidad alrededor de Girls U Code que ayude a las niñas desfavorecidas a aprender a codificar. Mi plan es cambiar la proporción de chicas en tecnología de una de cada cinco a al menos dos de cada cinco. Eso es un aumento del 100% en el número de tecnólogas en nuestra comunidad.” Samaira
La iniciativa fue todo un éxito, actualmente el juego se usa en más de 110 escuelas, habiendo reportado ya más de 35.000 millones de dólares. Gracias a su brillante aportación, Mehta ganó en 2016 el segundo premio en el Pitchfest de Think Tank Learning, recibiendo una carta de la ex primera dama Michelle Obama, que la felicitaba por su trabajo.
Tras su primer gran éxito, en forma de juego de mesa, Samaira ya esta trabajando en una nueva versión: CoderMindz, que enseña cómo programar desde el prisma de la inteligencia artificial.
Predicando con el ejemplo
Con esta trayectoria estelar, es de esperar que, igual que los equipos de fútbol fichan a jóvenes promesas para que jueguen en cantera, Samaira haya recibido varias ofertas por parte de grandes empresas tecnológicas.
Nuestra protagonista fue seleccionada por Stacy Sullivan, recursos humanos de Google, para incorporarse a la empresa cuando termine la formación universitaria. Todo un honor para esta joven talento que, admite, no descarta convertirse en una emprendedora que construya su propio negocio en un futuro.
Samaira se ha convertido en un referente a nivel mundial, inspirando a miles de niñas que deciden dejar a un lado los prejuicios para brillar con luz propia en lo que se propongan.
“Que seáis vosotros mismos y confiéis en lo que dicte vuestra mente. ¡Sed creativos!” Samaira
jajajaja no vaya a ser otra Steve Jobs femenina